Otras estafas comunes
Fraude del cuidador
Cuando las personas ya no pueden cuidarse a sí mismas,
pueden contratar a un cuidador, una persona de confianza que atienda sus
necesidades y sea responsable de ellos. “Cuidadores” es un término amplio que
incluye a parientes, amigos o cualquier persona contratada para asistir a la
persona. Desafortunadamente, el fraude, robo y manipulación de los cuidadores
se hace cada vez más común.
A veces los cuidadores toman el dinero y las pertenencias de
un adulto mayor, aun cuando sea un familiar de confianza. Un cuidador puede
pensar que el adulto mayor nunca notará la pérdida, o cree que tomar algo está
bien dado que el cuidador lo heredará con el correr del tiempo. Dichas acciones
son ilegales, sin considerar quién las cometa, y se deben informar a la policía
local o
Servicios de Protección del Adulto.
Sospeche si:
• un cuidador parece reacio a gastar dinero en nombre del
adulto mayor por tratamiento médico necesario, alimentos, medicinas, ropa u
otros servicios para el adulto mayor,
• un cuidador aísla al adulto mayor de su familia, amigos o
vecinos;
• un cuidador parece interesado en los asuntos financieros
del adulto mayor;
• un cuidador “recibe” o “le prestan” objetos valiosos (por
ejemplo joyas) o activos financieros del adulto mayor, con o sin el
consentimiento del adulto mayor;
• un cuidador hace retiros en nombre del adulto mayor,
utiliza la tarjeta de crédito del adulto mayor o escribe cheques, sin
conocimiento y/o permiso del adulto mayor;
• un adulto mayor agrega el nombre del cuidador en las
cuentas bancarias, dando al cuidador acceso completo al dinero del adulto
mayor;
• un adulto mayor nombra al cuidador “representante
financiero”, lo cual da al cuidador control total de los asuntos financieros
del adulto mayor;
• un cuidador afirma tener un problema serio y pide al
adulto mayor una gran cantidad de dinero.
Los ejemplos comunes incluyen reclamaciones de
procedimientos médicos costosos, grandes facturas legales, un automóvil nuevo,
o que el pariente del cuidador “necesita” asistencia financiera.
Fraude de Medicare
El fraude de Medicare se efectúa en diversas formas y cuesta
a los contribuyentes cientos de millones de dólares al año. A veces a los
pacientes se les cobran servicios que Medicare ya cubre, de modo que verifique
que todos los cobros, incluyendo los copagos, sean efectivamente pagos que
usted deba efectuar. No lleve consigo su tarjeta Medicare a menos que la
necesite para una cita con el doctor. JAMÁS entregue su número de Medicare a
nadie excepto a su proveedor de cuidado de salud; no la entregue en las ferias
de salud o exámenes “gratuitos”.
Sea cuidadoso —evite los proveedores de cuidados de salud
que le digan que algo normalmente no es cubierto, pero que ellos pueden lograr
que Medicare lo pague.
A menudo se le cobra a Medicare servicios que usted jamás
recibió. Más adelante, usted no podrá recibir el cuidado necesario porque su
asignación anual se ha consumido. Siempre revise su notificación de resumen de
Medicare e informe errores e inquietudes al contratista administrativo de
Medicare cuyo nombre aparece en la notificación de resumen Medicare. Informe
acerca de sus sospechas de fraude relacionado con Medicare al Departamento de
salud y servicios humanitarios de los Estados Unidos (ver página 36).
Además, cuide su privacidad médica. Jamás permita a nadie,
salvo los respectivos profesionales, revisar sus registros médicos o que le
recomienden servicios médicos. Además siempre esté atento porque los
estafadores podrán intentar robar su información personal a través de sus
registros médicos, de modo que asegúrese de la seguridad de sus datos.
Conozca sus opciones Medicare —El programa de consejería y
defensa del seguro de salud (HICAP, por sus siglas en inglés) asiste a las
personas y familias con problemas relacionados con Medicare, el seguro
suplementario de Medicare, el cuidado administrado, la planificación de cuidado
a largo plazo y el seguro de salud (ver página 38 para listado HICAP).
fuente: 03TO-otras-estafas-comunes.pdf